El vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones (BEI), Ricardo Mourinho, y el director de Finanzas y Desarrollo de Cellnex, José Manuel Aisa, han firmado un acuerdo de financiación de 315 millones de euros para «apoyar el desarrollo de la infraestructura de telecomunicaciones móviles», que es la base para el despliegue del 5G, en España, Portugal, Francia, Italia y Polonia.
Está previsto que el préstamo movilice una inversión de 631 millones “para mejorar y ampliar la cobertura y capacidad de infraestructura de redes móviles de muy alta velocidad” en estos países, con el fin de ayudar a acelerar la transición digital en zonas urbanas y rurales.
El proyecto incluye nuevas infraestructuras como torres de telecomunicaciones móviles y emplazamientos urbanos, mejoras para que esta infraestructura sea compartida por varios operadores o el despliegue de fibra para conectar las torres a la red de cada operador.
También está considerando sistemas de antenas distribuidas para aumentar drásticamente la capacidad del sitio y la instalación de energía renovable y otras medidas de eficiencia energética en sitios seleccionados para ahorrar energía y reducir las emisiones de dióxido de carbono de la red.
REDUCCIÓN DE LA BRECHA DIGITAL
Alrededor de la mitad de las nuevas torres se ubicarán en las regiones de Cohesión, que tienen un ingreso per cápita inferior al 75 % del promedio de la UE, para reducir la brecha digital y generar beneficios socioeconómicos en áreas políticas.
Mourinho ha destacado que este proyecto servirá para «acelerar la transición digital en Europa» y que el préstamo está destinado a aumentar y optimizar las infraestructuras de telecomunicaciones móviles en cinco países.
Aisa ha señalado que el acuerdo refuerza la relación de Cellnex con las infraestructuras europeas y le permitirá seguir apoyando a los clientes “en el despliegue de nuevos emplazamientos que aseguren la extensión eficiente y fluida del 5G en varios países”.