La agencia de calificación DBRS Morningstar confirmó la calificación de España en ‘A’ el viernes y dijo que espera una perspectiva estable a pesar de la convocatoria de elecciones generales el 23 de julio.
Desde la agencia señalan que esta tendencia se debe a que los riesgos para los ratings «están equilibrados» y DBRS espera que en la próxima legislatura haya «continuidad» en la aplicación del plan de estímulo para España y fiscal. compromiso de trayectoria.
Además, valora que el crecimiento económico del país “sigue siendo sólido, aunque desacelerándose” tras dos años de fuerte recuperación. “Los riesgos de crisis energética han disminuido y la inflación general ha bajado considerablemente en España en los últimos meses”, ha subrayado.
En este contexto, señalan que la deuda pública ha «disminuido significativamente» hasta el 113,2% del PIB en 2022, frente al 120,4% del PIB en 2020, pero «se mantiene muy por encima de los niveles previos a la pandemia». Así, subrayan que “los efectos del crecimiento nominal y la reducción del déficit público son un buen augurio para la reducción de la deuda pública en los próximos dos años”. “Sin embargo, mantener la deuda pública en una tendencia a la baja más permanente probablemente requerirá más acciones en el futuro”, advierten.
Asimismo, la agencia de calificación destaca que la elevada ratio de deuda pública de España “limita el margen de respuesta del Gobierno ante perturbaciones y lastra las cuentas presupuestarias, especialmente en un contexto de mayores costes de financiación y de aumento del gasto ligado al envejecimiento de la población”. .
La dinámica laboral históricamente volátil de España, la alta y lenta productividad laboral siguen siendo desafíos estructurales, según DBRS, que dice que esto limita el crecimiento de la renta per cápita y el potencial de producción, «pese a que la nueva reforma del mercado laboral está reduciendo significativamente la proporción de contratos temporales». .