La tasa de inflación subyacente de Japón, que excluye el impacto de los precios de los alimentos frescos, fue del 3,4 % interanual en abril pasado, por debajo del 3,1 % de los dos meses anteriores, según los datos publicados por el ministerio. interior y comunicaciones del país nipón.
En el caso de la tasa de inflación general, el IPC alcanzó el 3,5% en el cuarto mes de 2023, frente al 3,2% del mes anterior, la mayor suba del índice desde enero pasado.
Asimismo, la tasa de inflación subyacente, que además de los alimentos frescos también excluye la energía, se disparó hasta el 4,1% en abril, tres décimas más que el mes anterior, alcanzando su nivel más alto desde 1981. .
En abril, el precio de los alimentos frescos subió un 9% interanual, frente al incremento del 8,2% observado en marzo, la mayor subida desde 1976.
En el caso de los servicios, los costes subieron un 1,7% interanual en abril, frente al 1,5% del mes anterior, su mayor subida desde 1995 sin tener en cuenta subidas puntuales del IVA.
“La inflación subyacente superó el 4% por primera vez en 40 años, en parte debido a un aumento en la inflación de los alimentos”, dijo Darren Tay, economista japonés de Capital Economics, quien confía en que la inflación disminuirá para fin de año. sin embargo. el año por debajo del 3% debido a un probable repunte del yen y la desaceleración del crecimiento de los salarios.
Sin embargo, dada la persistente presión sobre los precios de los alimentos, el experto advierte que la inflación subyacente podría alcanzar un máximo de 4,5% a mediados de año, aunque está convencido de que «el ciclo inflacionario probablemente esté llegando a su fin». y se observa un rápido descenso de la inflación en el segundo semestre de 2023.