El sector de los snacks, que incluye empresas que fabrican patatas fritas, frutos secos y otros snacks, cerró el año 2022 con un aumento de la facturación del 10,23% respecto al año anterior, hasta los 2.755 millones de euros, lo que llevó a este mercado a crecer por encima de los dos dígitos para por primera vez en la última década en un contexto marcado por la inflación.

En esta línea, desde hace más de un lustro, el mercado nacional de aperitivos y snacks mantiene un crecimiento constante, entre un 5 y un 6%, “fruto de la innovación y el buen hacer en el sector, cada vez más relevante dentro del tejido económico español”. , según afirma la presidenta de la Asociación de Aperitivos, Marta Puyuelo, en una entrevista con Europa Press.