La Comunidad de Madrid exigirá el viernes a la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, una solución «inmediata, urgente y extraordinaria» a las averías de la red de Cercanías en la región.
Así lo dijo este lunes en Arroyomolinos el ministro de Transportes e Infraestructuras, David Pérez, al ser consultado sobre la autonomía que pedirá durante la reunión que mantendrá el viernes con el Gobierno central.
Esta reunión se fijó para el pasado viernes después de que el Ejecutivo autonómico diera un ultimátum. Dijeron que si no recibían respuesta del Ministro ese día a la carta enviada por las decisiones de Cercanías, estudiarían medidas legales. Esa misma semana, un problema en la infraestructura del túnel de Recoletos provocó retrasos y cuellos de botella en cinco líneas de la red.
“No vamos a la reunión a pedir nada. Vamos a exigir respeto a los madrileños, que haya responsabilidad pública. No se puede seguir abandonando la red así”, dijo Pérez a los medios. Considera que la «desinversión» ferroviaria se debe a que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quiere «castigar a los madrileños».
El problema, según el asesor, es que la falta de financiación “mantenida en el tiempo” se convierte en “constantes averías”. Le puso feo al PSOE que cuando llegó al Gobierno tras la moción de censura que expulsó al PP de La Moncloa, rechazara el plan de Cercanías de 5.000 millones de euros para Madrid.
Por eso durante la reunión reiterará la exigencia que ya hizo en el ultimátum del viernes, que se dote un fondo con un mínimo de 2.000 millones de euros para solventar «parcialmente» las carencias de la red. “Queremos que los impuestos de los madrileños vuelvan a la región”, concluyó.