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podcast | Así funciona la gestión del talento

La gestión de recursos humanos ya no es representativa de la gestión de las personas que trabajan en una organización. Y cuando una empresa ve a sus trabajadores como recursos, no como personas, obtendrá su trabajo, pero no su talento.

Juan Martínez es director de cultura y desarrollo de talento de la consultora atSistemas y un amante de las personas y de su trabajo, que es desarrollarlas. Y lo tiene muy claro: una empresa puede obtener un resultado gracias al trabajo de sus recursos humanos, pero… ¿Cuál es el costo de oportunidad de no obtener la “mejor versión” de las personas que trabajan en su organización?

La gestión del talento tiene como objetivo el desarrollo tanto de la empresa como de las personas que trabajan en ella.

cultura y talento

El talento es una combinación de conocimientos, habilidades o capacidades, experiencia y mentalidad.

Con estas cuatro variables es posible analizar muchos perfiles de trabajadores, e incluso diferentes etapas de la vida profesional.

Salimos de nuestra formación llenos de un conocimiento general de un campo, generalmente sin experiencia y con una mentalidad muy proactiva. Tenemos algunas habilidades innatas, pero nos faltan otras que nos dará la profesión y la relación con nuestros jefes y compañeros.

A medida que nos desempeñemos profesionalmente, adquiriremos un conocimiento más preciso de nuestra actividad (probablemente perderemos conocimientos genéricos) y ganaremos experiencia en el sector. Nuestras habilidades se habrán desarrollado a medida que asumimos diferentes retos, y la mentalidad… ¿seguiremos queriendo proponer o cambiar nuestro entorno?

La gestión del talento busca atraer a personas que tengan los conocimientos, habilidades, experiencia y mentalidad que el negocio necesita o necesitará. Pero no sólo los quiere en su plantilla, también busca desarrollarlos para sacar la mejor versión de las personas, en su beneficio y el de la propia empresa.

En una empresa que gestiona bien el talento, no tiene sentido hablar de retención, porque el talento quiere quedarse donde es bienvenido. Y no es de extrañar que el salario no sea el rendimiento que el trabajador obtiene por su trabajo, sino sólo una parte de él.

Acompañar a Juan Ramón Lucas y Ana Comellas en la gestión de su talento por parte de Juan Martínez, que es mucho.

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Camelia Granados Olivas

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