Debido a incendios forestales, huracanes y otros desastres naturales, en los últimos años ha habido un repunte en el uso de generadores diésel como energía de respaldo cuando falla la red. Solo en California, el número de estos generadores aumentó un 34 % entre 2018 y 2020, según la firma de análisis político M.Cubed. Este poder puede ser vital en situaciones de emergencia para operar equipos médicos y otros equipos necesarios. Pero esto tiene un costo enorme para la salud humana.

«Si usas un generador diésel de un megavatio, te comprometes a aumentar estadísticamente la tasa de cáncer»dice Doug Bernauer, CEO de Radiant Industries.