(CNN Español) — Este jueves atacaron a balazos un supermercado perteneciente a la familia de la esposa de Lionel Messi y dejaron una nota amenazando al jugador de la selección argentina de fútbol, quizás el mayor ídolo actual del país. El hecho ocurrió en Rosario, ciudad natal de Messi, y las autoridades buscan a los responsables del ataque, que contó con al menos 14 disparos. La nota con las amenazas menciona al alcalde de la ciudad y, desde su circulación, su nombre se ha reproducido en el país y en el mundo.
El alcalde es Pablo Javkin, un abogado de 51 años que desde 2019 gobierna Rosario, la ciudad más grande de la provincia de Santa Fe y una de las más importantes de Argentina. Por su filiación política pertenece al Frente Cívico y Social Progresista, coalición de los partidos Socialista y Democrático Progresista, entre otros.
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Luego de una trayectoria que incluyó cargos como Concejal Municipal de Rosario (2001-2005 y 2017-2019) y Diputado Nacional de la Provincia de Santa Fe (2013-2015), su gestión al frente del municipio comenzó con desafíos inéditos para la ciudad: la pandemia de covid-19 y la escalada de violencia y tensión tras el conflicto con el narcotráfico.
Actualmente, Javkin busca posicionarse como candidato a gobernador de la provincia de Santa Fe en las elecciones de este año, en una suerte de alianza con el frente opositor Juntos por el Cambio. El plan es sacar de la gobernación al partido Justicialista, encabezado por el peronista Omar Perotti.
Desde que comenzó a participar profesionalmente en la política como miembro de Afirmación por una República Igualitaria (ARI), grupo liderado por la opositora Elisa Carrió, el crecimiento de la figura de Javkin lo llevó a ocupar el cargo de concejal de Rosario a alcalde de la municipio de un período inferior a 20 años.
La lucha contra el crimen organizado le ha dado proyección política nacional. De hecho, desde el año pasado ha sostenido varias reuniones con el Presidente de la Nación, Alberto Fernández, y el Ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, para exigir una participación más activa del Gobierno nacional en esta lucha.
En ese sentido, Javkin se propuso manejar su propia policía, ahora a cargo de la provincia de Santa Fe, y obtener la autonomía de la ciudad, para decidir unilateralmente sobre el destino de los recursos generados por Rosario.
En declaraciones públicas, el funcionario dijo que el fenómeno del narcotráfico «abarca toda la Argentina y requiere respuestas institucionales en todos los niveles».
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Además, aseguró que “lo que está pasando hoy en Rosario, por ser el polo logístico más importante del país, está pasando en otros lugares, aunque no se manifieste de manera violenta”.
Hace unos meses, Javkin hizo pública la detección de una «enfermedad de la próstata» que le afectaba. Pese a ello, aseguró que se mantendrá en el cargo sin ningún problema. Tras su decisión, todo el espectro político le dio un apoyo unánime.