Spotify cerró el segundo trimestre del año con unas pérdidas operativas de 247 millones de euros, un 27,3% superiores a las registradas durante el mismo periodo de 2022, según informa la compañía de servicios multimedia.
La compañía sueca indicó que estos resultados se deben en parte a que los gastos netos de este segundo trimestre alcanzaron los 135 millones de euros.
Esta cantidad se reparte entre los 44 millones de euros que ha costado a Spotify el cierre de varios podcasts y el deterioro de algunos de sus inmuebles, y los 91 millones de euros destinados a su plan de optimización de estos activos.
Así, excluyendo estos cargos, la pérdida operativa ajustada de Spotify ascendió a 112 millones de euros, superando las propias expectativas de la compañía.
Según la empresa, esta cifra refleja el aumento de las cargas sociales y de los gastos de personal, parcialmente compensado por menores gastos legales y de marketing.
En cuanto a los ingresos de Spotify, alcanzaron los 3.200 millones de euros, un 11% por encima de la cifra del segundo trimestre de 2022 y en línea con las previsiones de la compañía.
Por su parte, el margen bruto ajustado para este periodo fue de 25,5%, cifra cercana a las expectativas de la marca y a la obtenida en el mismo periodo de 2022.
En cuanto a los oyentes, según los datos ofrecidos por Spotify, sus usuarios activos mensuales crecieron un 27%, alcanzando los 551 millones. Por su parte, los suscriptores aumentaron un 17%, hasta los 220 millones. De cualquier manera, la compañía llamó a los números récord de resultados.