El Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) consideró como accidente de trabajo el suicidio de un trabajador de una cadena de supermercados e impuso a la mutua el pago de una indemnización y pensiones de viudedad y orfandad a su mujer y a su hija de 16 años .

En una sentencia de 28 de febrero, a la que ha tenido acceso Europa Press, la Sala de lo Social del TSJC confirmaba el recurso interpuesto por la viuda de este trabajador contra una resolución previa del juzgado número 3 de Santander, en la que se incluía que el suicidio n no estaba relacionado con los problemas que padecía en el trabajo sino también con los problemas conyugales y la enfermedad de su padre.